Esta revolucionaria tecnología de ultrasonidos médicos focalizados es perfecta para contrarrestar el paso del tiempo y recuperar la firmeza y juventud del rostro. Ayuda a tensar, combatir la flacidez y reafirmar el óvalo facial.
El tratamiento HIFU facial en Madrid utiliza ultrasonidos focalizados de alta intensidad para rejuvenecer la piel sin cirugía, estimulando la producción de colágeno.
1
Limpiamos con suavidad la piel con el fin de eliminar cualquier tipo de residuo.
2
Administramos la energía ultrasónica focalizada de alta intensidad en las capas profundas de la piel. Esta energía calienta el tejido dérmico subyacente y estimula la producción de colágeno
3
Como paso final, aplicamos hidratación y protección cutánea para conservar su estado nutrido tras el procedimiento.
* Esta información es en términos generales. La frecuencia adecuada depende de cada paciente y de las necesidades específicas.
Beneficios del tratamiento con hifu
El tratamiento HIFU ofrece mejoras notables en la firmeza y elasticidad de la piel, reduciendo arrugas y líneas de expresión, para un aspecto más juvenil.
Tensa, tonifica y rejuvenece la piel reduciendo la flacidez de forma natural
Disminuye visiblemente arrugas y líneas de expresión
Estimula la producción de colágeno y elastina
Es una técnica no invasiva
Reduce la flacidez facial mediante la focalización selectiva de energía ultrasónica
Reafirma el óvalo facial, mejorando su definición
Preguntas frecuentes sobre el tratamiento hifu facial
Si tienes dudas sobre el tratamiento HIFU te las resolvemos.
¿Es un tratamiento doloroso?
Aplicamos anestesia, por lo que no es un tratamiento excesivamente doloroso.
¿Cómo estaré al terminar el tratamiento?
La piel puede parecer enrojecida al principio pero desaparecerá en pocas horas. Algunos pacientes experimentan una ligera hinchazón, hormigueo o sensibilidad al tacto de forma temporal.
¿Cuál es el efecto?
Una piel mucho más tersa y con una significativa reducción de la flacidez.
¿Cada cuanto realizar un tratamiento facial hifu?
Se recomienda de una a tres sesiones al año. Los resultados son inmediatos y van aumentando progresivamente en el tiempo.
* Esta información es en términos generales. La frecuencia adecuada depende de cada paciente y de las necesidades específicas.